Tendremos que volver a casa

El Mallorca goleó al Murcia por 1-4 y le deja virtualmente descendido · Toca pensar en la plantilla del próximo año


No hay esperanzas. El que crea que el Real Murcia se va a salvar es un necio y un iluso. El equipo de Javier Clemente va a pagar sus propios errores y volverá a su Segunda División en el año de su Centenario. Un año que se preveía maravilloso: la afición se había volcado con el equipo que, a base de talonario, se consideraba el mejor en muchos años. A eso le añadimos un gran inicio de temporada que no hacía presagiar ni por asomo el trágico desenlace al que nos avecinamos.
Cosas como ese negativo proceso hacen dudar de la calidad de Lucas Alcaraz como entrenador de Primera División. Ha demostrado con creces ser un gran técnico en la Categoría de Plata, pero ni en el Recreativo, ni en el Racing, ni tampoco en el Murcia ha podido sobrevivir en Primera.
De Javier Clemente no había dudas y siguen sin haberlas. Todos sabemos de las cualidades del vasco, pero no ha tenido tiempo para reconducir esta situación. Una estructura de la plantilla mal hecha desde el principio, sin variedad de juego posible, unos jugadores hundidos moralmente y la mala suerte eran demasiados rivales para Clemente. Aunque no nos engañemos, como todos, ha podido hacer más. Según sus palabras, no se le caen los anillos por entrenar en Segunda. Creo que Javier Clemente es un tipo comprometido, que sabe lo que hace y si le damos tiempo puede resucitar a este Murcia moribundo.


Una lenta caída
Los 22 puntos logrados en las 19 primeras jornadas parecían una renta más que suficiente para afrontar con relativa tranquilidad la segunda vuelta. Pero 14 jornadas después, el Murcia sólo ha sido capaz de sumar siete puntos, lo que le ha hundido en la parte baja de la tabla y es el más firme candidato a acompañar al Levante a Segunda. Parecía resurgir de sus cenizas con las victorias ante Español (4-0) y Valencia (1-0), pero esa ilusión la ha quebrantado el Mallorca con un barapalo que se antoja definitivo (1-4). Para tener opciones de salvación reales, los granas están obligados a ganar los cinco partidos que le quedan de aquí al 18 de mayo. Sevilla, Racing, Bilbao, Osasuna y Barcelona deberán perder para que el Real Murcia pueda seguir en Primera. Parece imposible, teniendo en cuenta que de 33 partidos, los de Clemente han ganado 7 y no han sido capaces de encadenar dos victorias consecutivas. La fe es lo último que se pierde, pero muchos milagros necesitamos para llegar al cielo.


Buscar el ascenso rápido
De confirmarse el descenso, el Murcia deberá planificar cuanto antes el plantel que afronte el reto de retornar cuanto antes a Primera. Bajar a Segunda traerá consigo la salida de algunos de los jugadores que más cobran, ya que sus sueldos no se podrían mantener. Fernando Baiano, Álvaro Mejía, Henok Goitom, José María Movilla y Adolfo Rosinei posiblemente dejen la nave grana, pero colocarlos no va ser fácil, ya que su rendimiento no ha acompañado esta temporada, y pocos equipos estarán dispuestos a pagar traspaso. Así, el Murcia podría perder mucho dinero en darles la baja a estos jugadores. De esta manera, puede que la directiva se vea obligada a vender a alguno de sus pesos pesados o promesas, como son los casos de Iván Alonso y Dani Aquino, a quienes no les faltan ofertas. Los cedidos, Carini (Inter), Curro Torres y Regueiro (Valencia), Arzo (Villarreal) y Pablo García (Real Madrid) volverán posiblemente a la disciplina de sus clubes de origen. En el caso de Arzo, el Real Murcia estaría interesado en contar con él en Segunda, pero sin pagar traspaso, algo que el Villarreal no está por la labor de aceptar.
El resto de la plantilla es una incógnita. Los capitanes Ibán Cuadrado y Ricardo Pérez, Richi, deberían seguir y continuar llevando el peso del equipo sobre sus hombros. Otros como Pignol, Jofre, Abel, Gallardo o Peña han demostrado un grandísimo nivel en Segunda, por lo que su continuidad es muy probable. El marroquí Abderrahman Kabous está siendo uno de los mejores fichajes de esta temporada junto con De Lucas, y tanto el público como el cuerpo técnico verían bien su continuidad, la cual depende de ellos mismos. Los jugadores que menos han contado esta temporada, como De Coz, Ochoa, Marañón e Íñigo han rendido con sus clubes o con el Murcia en Segunda División, por lo que puede que continúen.
En fin, en general es una incógnita el equipo que afrontará el retorno a Primera, pero como dijo Clemente en la rueda de prensa posterior a la goleada, 'hay que hacerlo y hacerlo bien'.